junio 06, 2008

Maqroll el Gaviero

Terminé de leer ya todas las aventuras (publicadas hasta hoy) de maqroll el Gaviero. Yo tiendo a ponerme sentimental con muchos libros, es una de mis grandes pasiones, pero con lo que respecta a Great Expectations y a Maqroll el Gaviero, la cosa se pone muy personal. Son libros sencillos, de aventuras y desventuras, con un lenguaje sabroso, mirífico y melifuo que me provoca un placer enorme y trae sosiego a mi mente y alma. Con la novela "Abdul Bashur, Soñador de Navíos" lloré, y "Jamil" definitivamente me provocó sobresaltos de corazón. Es impresionente la manera en la que uno puede encariñarse tanto de un personaje "ficticio" que encuentra vida (y obra) en la mente, corazón y alma de un lector que se vuelve sencillamente, un amigo más que sigue con ahínco sus mútiples viajes.

3 comentarios:

  1. ORACIÓN DE MAQROLL

    «Tu as marché par les rues de chair»
    René Crevel, Babylone

    No está aquí completa la oración de Maqroll el Gaviero.
    Hemos reunido sólo algunas de sus partes más salientes,
    cuyo uso cotidiano recomendamos a nuestros amigos como antídoto
    eficaz contra la incredulidad y la dicha inmotivada.
    Decía Maqroll el Gaviero:
    ¡Señor, persigue a los adoradores de la blanda serpiente!
    Haz que todos conciban mi cuerpo como una fuente inagotable de tu
    infamia.
    Señor, seca los pozos que hay en mitad del mar donde los peces
    copulan sin lograr reproducirse.
    Lava los patios de los cuarteles y vigila los negros pecados del
    centinela. Engendra, Señor, en los caballos la ira de tus palabras
    y el dolor de viejas mujeres sin piedad.
    Desarticula las muñecas.
    Ilumina el dormitorio del payaso, ¡Oh, Señor!
    ¿Por qué infundes esa impúdica sonrisa de placer a la esfinge de trapo
    que predica en las salas de espera?
    ¿Por qué quitaste a los ciegos su bastón con el cual rasgaban la densa
    felpa de deseo que los acosa y sorprende en las tinieblas?
    ¿Por qué impides a la selva entrar en los parques y devorar los caminos
    de arena transitados por los incestuosos, los rezagados amantes, en las tardes
    de fiesta?
    Con tu barba de asirio y tus callosas manos, preside ¡Oh, fecundísimo! la
    bendición de las piscinas públicas y el subsecuente baño de los
    adolescentes sin pecado.
    ¡Oh Señor! recibe las preces de este avizor suplicante y concédele la
    gracia de morir envuelto en el polvo de las ciudades, recostado en las
    graderías de una casa infame e iluminado por todas las estrellas del
    firmamento.
    Recuerda Señor que tu siervo ha observado pacientemente las leyes de
    la manada. No olvides su rostro.
    Amén.

    (Álvaro Mutis, De Los elementos del desastre)

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  2. ¡Anda la osa, me quiero volver chango!, yo no he leído ninguno de esos libros, sí, lo confieso, pero en cuanto haya lana (malditos comics) compraré el primero, así que espero me des el nombre, jeje.

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  3. Uy, pues en Gandhi está bien barato, o no? Diego...
    Oigan, han escuchado de un artista llamado Enrique Breccia?, es ilustrador, y ha tenido varias apariciones en DC Comics, con Lovecraft y colaboraciones en Batman: Gotham Knights. Bueno, lo digo porque Fany me regaló el año pasado un libro de Cortázar ilustrado por él... se trata, nada más y nada menos, que un cuento llamado "Reunión", que describe las "empresas y tribulaciones", no de Maqroll, sino del Che, como tripulante del célebre Granma, al llegar a Cuba en la búsqueda del comandante Fidel Castro. Muy buen cuento, y muy buenas ilustraciones. Lo recomiendo ampliamente.
    Saludos.

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El Atrio agradece el comentario.