Promesas del Este

Por razones largas de contar, quejosas y poco relevantes apenas pude ver este filme del Master David Cronenberg con Viggo Mortensen como el protagonista de un drama donde la mafia rusa en gran bretaña hace de las suyas para impedir que una enfermera pueda resolver el misterio de una víctima sin identificación que llega al hospital con sólo un diario en ruso el cual se convierte en un McGuffin que desentraña una trama que está realmente bien escrita. Cada acto nos conduce de manera lógica al siguiente, a veces mostrando detalles que aclaran nuestras sospechas, dando forma a toda la trama pero sin revelar detalles que nos mantienen siempre a la espectativa. Es definitivamente un buen guión de suspenso y drama clásico, digno de Cronenberg que le gusta trabajar con la psique de los personajes, sus actitudes y naturalezas. Destaca la actuación de Mortensen quien interpreta a un miembro de la mafia rusa británica, ignoro si pronuncie bien el ruso, pero me pareció completamente verosímil en el rol, con rasgos arquetípicos pero nunca pasando de esa línea que desenvoca en el mal gusto de un personaje demasiado estereotipado. La fotografía como en otros filmes de Cronenberg hace mucho incapié en la creación de atmósferas, funde a ciertos personajes con el set para que el lugar donde se desarrolle la trama sea parte de la personalidad de ese actor, le ayude a construir el rol y podamos entenderlo mejor. La edición es estable, no se acelera para luego entablar secuencias lentas, Cronenberg nos lleva con un paso único que sostiene toda la historia en un sólo tono hasta que llega el desenlace. Eastern Promises es una cinta que no es espectacular, pero eso es lo que la hace genial, el cine podríamos hoy en día dividirlo en el que es espectacular (Eye Candy) y el que es de contenido, guiones inteligentes. A veces, cuendo tenemos suerte (y nos gustan ambas categorías) podemos ver uno que abarque ambos. Al menos yo, disfruto cada uno por separado, así como disfruto los que se conjuntan.

Eastern Promises recibe nachos con coca fría.