junio 14, 2011

Balda Triste de Trompeta

 Alex de la Iglesia es uno de esos directores que hay que ver, menospreciado pero igual de bueno que Almodóvar o Balagueró, en Balada Triste de Trompeta narra un drama portentoso lleno de elementos eclécticos que van de la comedia negra al drama histórico. Es un filme hecho por españoles para españoles lleno de momentos críticos en la historia de España, muchos de los cuales yo sinceramente no entendí por completo. A veces parece más una crónica que la historia de un triángulo amoroso lleno de elementos del teatro griego, el circo y el teatro del absurdo. Con un diseño de producción asombroso el filme tiene un guión súmamente completo que abarca casi cuarenta años de historia español todo visto a través de los ojos de un payaso. La prte que me pareció maravillosa de esta película es precisamente ese concepto del mundo como un escenario, pero uno donde los payasos tornan el drama al estilo Shakespeare en un absurdo, construyendo asimismo una crítica mordaz a los sistemas políticos de España y la era franquista. Es un filme en verdad complicado, plagado de elementos artísticos que manejan un claroscuro magnífico no sólo en su look, que puede tornarse gótico y en ocasiones Noir, sino también un claroscuro que matiza a los personajes quienes viven una tragedia imponente. Es una película ciertamente impactante. Una obra digna de Alex de la Iglesia. La fotografía está muy cuidada, busca ángulos creativos y encuadres ingeniosos. La edición mantiene un ritmo muy europeo donde entrelaza más de una historia que completa un cuadro que muestra el mundo en el que vivieron los personajes. Me atrevo a decir que este cine, es cine de verdad. No es "divertido" que ese me encanta también, es un cine narrativo donde la historia es lo que cuenta y los recursos fotográficos y de diseño son los que construyen la trama.
Balada Triste de Trompeta recibe unos nachos con queso y un Icee azul.

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