X Men clase primera

Este filme era un comodín de Marvel para competir este verano con los monstruos que son Thor, Captain America y Green Lantern, con poco Buzz y bajas espectativas llegó a las salas de cine arrasando con todo lo anterior. Es una película sencilla que cuenta una gran historia, el guión es realmente bueno, no es lo más fiel del mundo a los comics, pero está excelentemente bien hilado y escrito, con referencias a las historias originales que dejan complacidos a los fanboys, sin dejar en una total confusión a los neófitos. X Men first class retoma mutantes que no hemos visto (mucho) en los demás filmes resaltando la presencia de un clásico: Sebastian Shaw, no el líder original del Hellfire Club pero uno de los más relevantes, a su lado Azazel (padre de Nightcrawler) y el no tan conocido ni popular Riptide junto con la mutante más sexy de todas, White Queen Emma Frost. Esta peli tiene ese encanto de los viejos comics de X Men de Byrne, Claremont, Romita e incluso los de Lee (Jim, no Stan) en la década de los noventa. Los trajes que usan son una referencia directa al renacimiento X men de los setenta con la aparición de Wolverine, Colossus, Banshee y Storm. Pero regresando el filme, es una joyita de la cinematografía de comics, hubicando la historia en la década de los sesenta e involucrándolos con la crisis de los misiles de Cuba (no es spoiler, se ve en los trailers), esto me lleva al diseño del vestuario que es asombroso, ese estilo sesentas presente en cada uno de ellos sin los estilos de cabello tan ridículos de la época. El diseño de producción es uno de los mejores. La fotografía es excelente y por supuesto, el maquillaje. Algo genial de este filme es que no es una explosión de efectos visuales y especiales, sucede lo que es necesario y se acerca mucho a la esencia verdadera de la vida de los Hombres Equis, al menos la que hemos leído desde hace unos veinte años. La edición dinámica, concatenando cada acto de manera lógica y resolviendo los giros sin tropiezos. Este es un filme realmente bonito, en todo el sentido de la palabra. Muy probablemente en unos años, esté mejor posicionado en nuestra memoria que Wolverine e incluso la tercer entrega de X Men. Un clásico instantáneo que lo logra con base en no intentar se presuntuoso. Hay que verla si eres fan, y vas a disfrutarla si eres neófito.

X Men: First Class recibe unos nachos con queso y un Icee azul.